Lic. Olga Nazor [1]
La relación entre museos y paisajes culturales está siendo analizada, celebrada y expuesta por la comunidad museológica a través del mundo, ya que este año es tanto el tema del Día Internacional de los Museos, como el eje en torno al cual se organizan las actividades de la 24° Conferencia General del International Council of Museums (ICOM).
Dentro de ICOM y como Subcomité de ICOFOM [i] para América Latina y el Caribe, el rol del ICOFOM LAM es el de reflexionar teóricamente sobre esta relación entre museos y paisajes culturales, los supuestos y categorías que subyacen –y deberían preceder- a las praxis museográficas con las formas que toman las aplicaciones concretas y la necesidad de coherencia entre todos estos aspectos.
En este sentido, nos interesan dos conceptos iniciales: “museo” y “paisaje cultural”, sus teorizaciones y las prácticas posibles que se desprendan de las mismas. Aunque hay múltiples definiciones de museo, que han variado con el tiempo concomitantemente con sus propios cambios, podemos asumir un cierto consenso sobre qué es un museo [ii], en cuanto a que es una institución que gestiona patrimonio, preservándolo, con una meta comunicacional social. Por otra parte, existe una miríada de enfoques teóricos –objeto de conocimiento de la Museología- sobre esta ubicua institución, su razón de ser, sus modos de operar, en fin, sus fundamentos mismos. La Museología es un campo de conocimiento académico de naturaleza interdisciplinaria, bien establecido en la actualidad, y con raíces en diferentes disciplinas humanísticas que intersectan en la institución museo. Hoy, el objeto de conocimiento de la Museología es el análisis de los procesos de musealización, esto es, las formas en las cuales una sociedad selecciona y administra productos culturales que son preservados para la posteridad. La investigación de los procesos de musealización se realiza desde perspectivas históricas, reflexivas y comparativas en las que se evidencia la existencia de un cierto “núcleo duro” de pensamiento crítico común a la masa de los estudios museológicos desde al menos la década de 1990. Si bien los museos como instituciones llevan tres siglos de desarrollo, las raíces del coleccionismo que les dio origen se hunden en los cambios culturales y ambientales de un milenio atrás, lejos, muy lejos del museion griego constituido en la lógica de otra cosmovisión.
Por su parte, la idea misma de paisaje cultural proviene de la Geografía, una disciplina bien establecida, y particularmente desde el trabajo clave de Sauer (1925) en adelante ha habido un continuo debate conceptual al interior disciplinar [iii]. Además, la idea de “paisajes culturales” no sólo llega al mundo museístico desde otro campo en el cual aún continúa siendo debatido teóricamente, sino que en las últimas décadas es un concepto que se expandió hacia varios otros campos del saber, como la antropología, la arqueología o la arquitectura, vinculado con la sobrecarga filosófica ultramoderna de tiempo, espacio e individuo (Buchanan 1999). Desde finales de la década de 1960, concomitantemente con la intensificación de la preocupación general por el deterioro del ambiente, ha habido un desplazamiento desde el concepto de lo "natural" (como externo al mundo de lo "cultural") hacia el más abarcativo concepto de "ambiente" (que incluye naturaleza y cultura). Esto se reflejó en su vinculación al mundo del patrimonio, históricamente inclinado hacia las artes y la cultura, y donde el ambiente constituyó más un escenario que un tema de interés central. Este cambio se evidenció en el nuevo modelo institucional de los ecomuseos, pioneros en la integración sociedad y ambiente en instituciones pensadas como descentralizadas. A su vez, el primer Encuentro del ICOFOM LAM (Buenos Aires 1992) se desarrolló bajo el tema “Museos, sociedad y medioambiente: una trilogía integrada”. No obstante, “Paisaje” no es naturaleza, no es territorio, no es ambiente… y claramente, siempre es cultural. Aunque las definiciones de “paisaje cultural” enfatizan que se trata de una combinación de naturaleza e historia (UNESCO 1972; ICOM 2016), no hay paisaje que no sea cultural, puesto que es la mirada social humana la que le da entidad al entorno, la que “lee” al mundo de una cierta forma y no de otra, dependiendo de la sociedad de que se trate. ¿Qué es lo que define la identidad colectiva, a qué escala, en la interfaz socioambiental? ¿Quién define, además, lo identitario? Los paisajes culturales definidos como tales por UNESCO se caracterizan, sin dudas, por su gran impacto visual, o estético, y donde la antropización, los efectos de la acción humana sobre el ambiente es claramente visible. Sin embargo, otros espacios altamente modificados, o incluso intervenidos hasta darles su forma actual, como la selva amazónica (Balée 2013) no son considerados paisajes culturales en la misma medida, posiblemente porque la intervención no es tan obvia para el observador, o en concurrencia con su falta de potencial como espacio gestionable en términos turísticos.
También se enfatiza, en las conceptualizaciones de Paisaje Cultural, su cambio continuo, su flujo consecuente con su coparticipación social. Esto plantea un nuevo desafío, señalado por Robert Cook (1996) al preguntarse si el concepto de paisaje cultural no encierra en sí mismo la imposibilidad de su preservación, ya que su inclusión de todo sumado a su mutabilidad constante contradice como un oxímoron la idea de su conservación.
Sin dudas, es muy necesario reflexionar teóricamente sobre éstas y otras cuestiones vinculadas a la museología, los museos, los paisajes, las culturas y la zona de interfaz entre ellos, desde donde se desprenden las prácticas. Las teorías subyacentes a los procesos de patrimonialización y las estrategias de gestión de las identidades locales no transcurren sin consecuencias, sino que operan a nivel práctico impactando sobre la vida de las poblaciones locales. Es parte de los desafíos de ICOFOM LAM pensarlo en la diversidad biocultural de América Latina y el Caribe.
[1] Presidente ICOFOM LAM.
[i] ICOFOM (International CommitteeforMuseology) es el Comité Internacional de ICOM dedicado a la discusión de teoría museológica
[ii] Pueden considerarse dos definiciones de referencia tanto la actualización de ICOM (2007): “El museo es una institución permanente, sin fines de lucro, al servicio de la sociedad y abierta al público, que adquiere, conserva, estudia, expone y difunde el patrimonio material e inmaterial de la humanidad con fines de estudio, educación y recreo” como la de la Constitución de Museums Australia “A museumhelpspeopleunderstandtheworldbyusingobjects and ideas to interpretthepast and present and explore thefuture. A museum preserves and researchescollections, and makesobjects and informationaccessible in actual and virtual environments. Museums are established in thepublicinterest as permanent, not-for-profitorganisationsthatcontributelong-termvalue to communities.” (Museum Australia 2013)
[iii] Ver por ejemplo, Groth (1997) y Riesenweber (2008).
Bibliografía
- Balée, W. 2013 Cultural Forests of the Amazon. A Historical Ecology of People and their Landscapes. The University of Alabama Press, Tuscaloosa.
- Buchanan, I. 1999 Non-Places: Space in the Age of Supermodernity. Social Semiotics 9 (3):393-398.
- Cook, R. E. 1996 Is landscape preservation an oxymoron? George Wright Forum 13 (1):42-53.
- Evrard, M. 1980 Le Creusot—Montceau-les-Mines: La vie d'un écomusée, bilan d'une décennie. Museum International 32(4):226-234.
- Groth, P. 1997 Frameworks for Cultural Landscape Study. En Groth, P. and Todd W. Bressi (eds.) Understanding ordinary landscapes pp. 1-21. London, Yale University Press.
- ICOM 2007 Estatutos del ICOM. Disponible on line en http://icom.museum/fileadmin/user_upload/pdf/Statuts/statutes_spa.pdf
- ICOM 2016 DIM 2016. El Tema. Disponible en http://network.icom.museum/international-museum-day/dim-2016/el-tema/L/1/
- Museums Australia 2013 Museums Australia Constitution http://museumsaustralia.org.au/userfiles/file/Governance/130725_MAConstitution-Rev2013.pdf
- Riesenweber, J. 2008 Landscape Preservation and Cultural Geography. En R. Longstreth (Ed.) Cultural Landscapes. Balancing Nature and Heritage in Preservation Practice, pp. 23-34. University of Minnesota Press, Minneapolis/London.
- Sauer, C. 1925 The Morphology of Landscape. University of California Publications in Geography 2 (2): 19-54.
- Schama, S. (1995) Landscape and Memory. London, HarperCollins.
- Strang, V. (1997) Uncommon Ground: Cultural Landscapes and Environmental Values. Oxford, Berg.
- UNESCO 1972 Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural Disponible online en http://portal.unesco.org/es/ev.php-URL_ID=13055&URL_DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.html